miércoles, 16 de junio de 2021

 PREVENCIÓN Y DIAGNÓSTICO TEMPRANO, CLAVES PARA HACER FRENTE AL CÁNCER DE PRÓSTATA EN EL MES DEL PADRE

● Según cifras de 2020 del Ministerio de Salud, el cáncer prostático es cada vez más común entre los hombres colombianos.

● Llevar un estilo de vida saludable y realizarse chequeos periódicos puede evitar complicaciones relacionadas con la enfermedad.

● El PSA y el tacto rectal son pruebas esenciales para un diagnóstico temprano. Ambas son ampliamente asequibles y consisten en procedimientos sencillos.

 Según información de la Cuenta de Alto Costo, un organismo técnico adscrito al Sistema General de Seguridad Social en Salud de Colombia, el cáncer de próstata fue el que más casos nuevos registró entre hombres colombianos a lo largo de 2019. El número de muertes producto de esta neoplasia en el país fue de 47 por cada 100.000 habitantes en 2020, de acuerdo con el Ministerio de Salud y Protección Social. Asimismo, el Instituto Nacional de Cancerología estimó que, en el mismo periodo, la cifra de diagnósticos reportados pudo superar el promedio anual en un preocupante 25%. De los cerca de 14.000 pacientes que traduce esa cifra, un tercio podrían resultar fatales.

El día del padre es un recordatorio de que querer equivale a cuidar. Y son, al menos tres, las recomendaciones de cuidado y prevención que la medicina contemporánea ofrece para evitar complicaciones relacionadas con el cáncer de próstata.

La primera tiene que ver con detectar riesgos y llevar un estilo de vida sana. Los principales factores de riesgo asociados a la enfermedad son el historial familiar en parientes de primer grado y la edad. Para atenuarlos, se recomienda controlar el peso corporal, mantener una actividad física moderada y una alimentación saludable. Pues, en 2014, una investigación de urólogos del Centro Médico Nacional de México observó que los hombres con sobrepeso u obesidad eran más propensos a desarrollar cáncer de próstata avanzado.

Así mismo, trabajos como el de la Universidad Norbert Wiener de Perú, en 2019, hallaron que una alimentación basada en una abundante ingesta de calcio (proveniente, principalmente, de productos lácteos) y carnes rojas está asociada a un mayor nivel de letalidad. De igual forma, un estudio de la Universidad de Bristol, del mismo año, afirma que los hombres físicamente activos tienen menos riesgo de desarrollar este tipo de cáncer.

El lento crecimiento y la ausencia de síntomas en el desarrollo de la primera fase de la enfermedad advierte que el diagnóstico más conveniente debe ser presintomático. Por esto, la segunda recomendación es realizarse periódicamente el examen sanguíneo del Antígeno Prostático Específico (PSA, por sus siglas en inglés). La prueba mide las cantidades de la proteína homónima, que en niveles altos podría ser señal de problemas prostáticos.

“Realizarse periódicamente la PSA puede ayudar a detectar anormalidades a tiempo. En los pocos casos en los que un tumor maligno se desarrolla velozmente en la próstata, esta prueba puede brindar información oportuna antes de que aparezcan complicaciones graves. De igual forma, un registro elevado del PSA puede señalar otras afecciones, como la hiperplasia benigna de próstata (un agrandamiento de la glándula prostática no cancerígeno), la prostatitis o un traumatismo perineales, de allí la importancia de complementar la PSA con el tacto rectal”, sostiene Andrés Torres de COLCAN laboratorio clínico, el cual ofrece la prueba a nivel nacional en 18 ciudades de Colombia.

Es aconsejable realizarse la PSA a partir de los 45 años y desde los 40 si al menos un pariente directo fue diagnosticado con la enfermedad. De acuerdo con el resultado de la prueba se determinará, entre otras cosas, la frecuencia con la que debe llevarse a cabo el análisis. Sin embargo, hay consenso en que los adultos mayores de cuarenta años deben asistir a revisión una vez al año.

Como tercera recomendación, los expertos sugieren complementar el PSA con un segundo examen: el DRE (Examen Digital del Recto, por sus siglas en inglés), también conocido como tacto rectal. Con este se busca establecer si se presenta endurecimiento o abultamiento en la próstata, lo que podría indicar cáncer. Consiste en una exploración sencilla de la parte anterior del recto.

Es importante subrayar que ambos exámenes deben realizarse de manera complementaria, pues por sí solos podrían arrojar resultados imprecisos. Si en los dos casos los resultados muestran anormalidades, lo más probable es que se lleven a cabo otras pruebas como la biopsia prostática.

El cáncer de próstata constituye una de las mayores preocupaciones tanto para la salud pública como para las familias colombianas. Detectarlo oportunamente garantizará que sus síntomas sean más tratables. Los procedimientos periódicos son sencillos y, acompañados de una vida saludable y activa, pueden asegurar una menor letalidad de cara al futuro.

Considerando que solo tres de cada diez hombres acuden a chequeos médicos en el país, fechas como la del día del padre sirven para recordar que una parte importante del control sobre las enfermedades radica en el autocuidado, las precauciones y, en suma, en la información de la que disponen los individuos. El cáncer de próstata, desde luego, no es una excepción y por esta razón es clave prevenirlo siguiendo las recomendaciones de los expertos.

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