HOTELES DANN ANALIZA EL CONTEXTO JURÍDICO DEL SECTOR HOTELERO

Afirma Fontalvo que el principal reto es actualizar el marco regulatorio, para evitar la competencia desleal y promover el adecuado desarrollo hotelero. Así por ejemplo, regular las plataformas que ofrecen habitaciones virtuales de carácter comunitario y los alojamientos u hospedajes que no se ajustan a los cánones de la comunidad hotelera internacional, debe ser una prioridad del legislador para promover la libre competencia en igualdad de condiciones, y permitir al sector hotelero contribuir adecuadamente al desarrollo social y económico del país mediante la generación formal de empleos directos e indirectos. Parte del desafío es generar las herramientas institucionales que permitan investigar y sancionar las conductas de los agentes que afecten la competencia, y promover políticas para el desarrollo de la industria hotelera en condiciones justas.
El esfuerzo legislativo debe hacer énfasis en la actualización de la ley 300 de 1996 a los nuevos fenómenos hoteleros, brindando garantías justas de competencia desde el punto de vista tributario, comercial y parafiscal. Se deben otorgar las suficientes herramientas a los entes reguladores para que vigilen, inspeccionen y sancionen a los agentes económicos que afectan la libre competencia y promuevan la informalidad turística. De esta manera, Fontalvo observa que los principales riesgos legales a los que se encuentra expuesta la industria hotelera actualmente, radican en los vacíos normativos que benefician a quienes ofrecen habitaciones en condiciones desregularizadas, mientras que el rigor de la ley solo se aplica a la hotelería organizada como empresa, quien es la que paga impuestos, parafiscales y genera empleo formal.
Por otro lado, los incentivos tributarios y fiscales deben existir de manera estable para fortalecer a las cadenas hoteleras colombianas. Las iniciativas de creación de mecanismos de estabilidad jurídica y fiscal para el sector turismo, promovidas por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, son vistas con escepticismo, ya que por el contrario, suelen generar inestabilidad, tal y como sucedió con la exención de la renta hotelera por construcción, remodelación y ampliación de hoteles, en donde, inicialmente, el beneficio se generaba por 30 años, pero luego, en el 2017, fue eliminado para dar paso a una tarifa preferencial del 9%, bajo el argumento de que se trataba de "simples expectativas".
Por último, respecto a la propuesta del gobierno de fomentar la creación de fondos de capital privado y de riesgo para la construcción de infraestructura hotelera y turística en el país, Fontalvo considera que la inversión extranjera o nacional siempre será bienvenida, siempre y cuando las condiciones de competitividad vayan de la mano con la creación de empleo y competencia leal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario