¿ESTÁN SUS GAFAS MAL GRADUADAS?
Unas
gafas mal graduadas ocasionan dolores de cabeza y cuello, mareos, visión doble,
picor y enrojecimiento de los ojos.
Cuanto
más exacto sea el examen que el optómetra realiza de sus parámetros
fisiológicos, de comportamiento y de agudeza visual; mejor será la experiencia
al utilizar sus nuevas gafas.
