CAFÉ CON LECHE, EL MEJOR RITUAL DE CADA MAÑANA
Cuenta la leyenda que durante el siglo XV, cuando las tropas del gran visir turco Kara Mustapha fueron expulsadas
de Viena; abandonaron un cargamento de sacos de café que se le cedieron a Yury Kolschitsky, quien había
luchado en la batalla para
expulsar al ejército invasor. Kolschitsky,
quien sabía tostar y preparar el café, decidió abrir una tienda llamada Botella
Azul (Hof zur Blauen Flasche) en donde comenzó a prepararlo. Cuando los
vieneses probaron el café no fue de su total agrado por su amargo sabor, así
que, Kolschitsky tuvo
la gran idea de mezclarlo con azúcar, leche y miel para suavizar su sabor.