En el día mundial de la Alimentación:
COBRE MUCHO MÁS QUE UN SIMPLE METAL
El
cobre es fundamental para la vida humana, ya que cumple tareas importantes como
la prevención de anemia y enfermedades óseas, detención de daño celular,
promoción de un desarrollo fetal adecuado entre otras.
El
cobre, como metal servicial que es, circula en forma de moneda, corchetes y
tornillos, está en los fertilizantes y pesticidas, se transforma en máquinas y
herramientas, luce radiante en bronce y latones de todo tipo y, como si fuera
poco, está presente en las nuevas aleaciones de alta dureza o de alta conductibilidad,
en los superconductores, en fusiones con efectos de memoria para las
computadoras, en el desarrollo de la siembra y cosecha de especies marinas,
incorporándose decididamente a un mundo
que deberá ser cada día más cómodo y más seguro. Sin embargo su presencia es
débil en el sistema más importante de todos: el cuerpo humano.
Estudios en China, EEUU y
Europa revelan que muchos adultos no reciben cantidades óptimas de cobre. Los
cálculos basados en encuestas a dietas individuales indican que más del 30% de
las dietas proveen menos de 1,0 mg de cobre al día –cantidad que a menudo se
considera como el umbral mínimo de cobre que el organismo requiere.