POR LA SALUD DE TODO, PIDEN CERTIFICADO DE VACUNACIÓN PARA CIERTOS SITIOS. O MUESTRA SU CERTIFICADO O NO ENTRA
Macron añadió: "entre más vacunemos, menos espacio habrá para que el virus se difunda, más hospitalizaciones se evitarán y se evitarán otras mutaciones del virus más peligrosas aún". Este llamado fue de efecto inmediato, la página Doctolib donde se reservan las citas para vacunarse, quedó saturada ante tantas peticiones. Hasta hace unos días, el presidente dedicaba sus discursos a detallar los planes de reforma en los últimos meses de su mandato y antes de la campaña presidencial de 2022. Delta, la variante descubierta en India a finales del año pasado, 60% más contagiosa, hizo forzar los planes a Macron.
La vacuna facilitará la vida y rechazarla, la hará más difícil. Se exigirá en los locales y lugares públicos el certificado sanitario que constata que un ciudadano ya recibió las dos dosis de vacuna o se ha sometido a prueba Covid con resultado negativo en las últimas 48 horas. Desde el 21 de julio será necesario mostrarlo en todo lugar donde el aforo supere las 50 personas y en agosto, se extenderá a restaurantes, bares con o sin terraza y medios de transporte. En octubre, como incentivo para que las personas se vacunen, las pruebas PCR ya no serán gratuitas con el fin, de que las personas rechacen menos vacunarse.
"A partir del 15 de septiembre, si usted es personal sanitario y no está vacunado, no podrá trabajar ni devengar un salario", dijo el ministro de sanidad, Oliver Verán a la cadena LCI. La vacunación no estará ampliada por ahora a la población mayor 12 años, en contra de la propuesta de la Academia Nacional de Medicina en Francia. Macron también anunció que el control en las fronteras se reforzará, su secretario de Estado para Europa, Clément Beaune, dijo que si se desea entrar a Francia desde España, se requiere un test de Coronavirus negativo 24 horas antes o el certificado de vacuna.
Con el fin de evitar una quinta ola, el presidente Macron subrayó: "Estoy a favor de la línea francesa ahora misma. Ya no tengo ninguna intención de sacrificar mi vida, mi tiempo, mi libertad y la adolescencia de mis hijas, así como su derecho a estudiar adecuadamente por quienes se niegan a vacunarse. Esta vez se queda usted en casa, no nosotros". "Soy consciente de lo que estoy pidiendo y sé que estás listo para este compromiso. Esto es en cierto sentido, parte de tu sentido del deber".
"Si todos estuviéramos vacunados, el virus no tendría nadie a quien infectar, pero no hemos llegado ahí".
Basado en:
El Comercio
El País
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