EXPERIENCIAS BAJO CERO PARA DESPEDIR EL 2025
Guías de Civitatis comparten experiencias donde el invierno es el gran escenario.
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Finlandia: una encantadora y blanca Navidad
Este país nórdico sorprende por sus lagos infinitos, bosques frondosos y la serenidad de sus pueblos. En diciembre, esa magia se intensifica y la experiencia se vuelve especialmente navideña con actividades como visitar la aldea de Papá Noel en Rovaniemi, capital de la Laponia finlandesa. Se puede llegar a esta ciudad en vuelo o en tren nocturno desde Helsinki y, una vez allí, es fácil moverse con tours y traslados locales para conocer sus principales atractivos.
En esta ocasión, expertos guías de Civitatis recomiendan tres tours con los que seguramente logrará tener recuerdos inolvidables de este destino:
Visita a un hotel de hielo: con una duración de tres horas, esta excursión desde Rovaniemi muestra el invierno en su mejor versión. El plan lleva al Arctic SnowHotel, construido íntegramente con hielo y nieve en plena naturaleza de los bosques de Laponia, donde los visitantes realizan un recorrido por sus espacios más representativos, incluidas las habitaciones de hielo y diferentes salas. La jornada finaliza con una cena típica finlandesa en el Ice Restaurant.
El segundo infaltable del destino es el Tour de Papá Noel, una actividad que se realiza durante todo el año en Rovaniemi. La propuesta incluye un recorrido por la aldea y una visita a uno de sus rincones más famosos: la oficina de correos, donde el lugar cobra vida entre cartas, sellos y regalos. Además, contempla la posibilidad de tener un encuentro con el mágico personaje navideño, cruzar el Círculo Polar Ártico y llevarse un certificado como recuerdo. El cierre es con una comida buffet tradicional antes del regreso al punto de encuentro.
En Rovaniemi, el invierno también se vive con adrenalina: la tercera actividad para cerrar el paso por este destino es un recorrido en moto de nieve por los bosques nevados de Laponia, una experiencia que combina velocidad y paisajes impresionantes. Tras la recogida en el hotel, se entrega el equipo para enfrentar las bajas temperaturas, como ropa térmica, guantes, botas y cascos. Durante cerca de una hora, la ruta se abre paso entre nieve y panoramas helados, con vehículos cómodos y de fácil uso incluso para principiantes.
La Antártida: Una Experiencia En El Continente Blanco
Hay destinos en el planeta que parecen reservados solo para exploradores, científicos o personajes de película. Y la Antártida, el continente más remoto, frío e inexplorado de la Tierra, es uno de ellos. Sin embargo, lejos de ser un sueño imposible, hoy es viable visitarla siempre que se haga con planificación, respeto por su carácter protegido y bajo experiencias diseñadas para minimizar el impacto en este territorio de naturaleza virgen.
La primera opción que recomiendan los guías permite visitar la Antártida por el día con un vuelo directo desde Punta Arenas (Chile) hacia la isla Rey Jorge (Shetland del Sur), uno de los principales puntos de investigación internacional en la zona. Tras aterrizar en la Base Presidente Frei, la experiencia combina recorridos a pie por la base y sus alrededores con una navegación en botes inflables de expedición para avistar fauna como pingüinos y contemplar el paisaje polar de glaciares, icebergs y acantilados helados, en una jornada de alto impacto visual.
La segunda alternativa es un crucero de diez días que parte desde Ushuaia (Argentina) hacia la península antártica, cruzando el Pasaje Drake para recorrer escenarios icónicos como la Isla Decepción y canales como Gerlache, Neumayer y Lemaire, con posibilidades de avistamiento de pingüinos, focas, elefantes marinos y ballenas (incluso orcas).
El itinerario incluye dos desembarcos diarios, según condiciones climáticas y decisión del capitán, en puntos seleccionados para explorar el continente y sus islas en botes inflables de expedición, acompañados por expertos guías y tripulación.
“Ofrecer productos como los de la Antártida responde a la creciente demanda de los viajeros por planes de aventura, naturaleza extrema y viajes inmersivos que conecten con entornos en su estado más puro. Y es que este destino no es solo un lugar geográfico: es una vivencia sensorial, emocional y humana completamente distinta. Conocer sus bases, hablar con quienes habitan temporalmente el continente, sentir la magnitud de su silencio y ver cómo la meteorología define cada decisión es una experiencia que puede cambiar la percepción del universo”, concluye María Carolina Padilla, country manager Civitatis.
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