miércoles, 25 de enero de 2017

Asesoría médica del Dr. Rómulo Rodado, anestesiólogo, Jefe de Hospitalización y cuidado crítico en Clínica La Colina.

MANEJO DEL DOLOR EN EL PARTO: LO QUE DEBE SABER UNA MUJER EMBARAZADA


  • El manejo del dolor en el parto es una inquietud común para muchas mujeres embarazadas. Cómo manejarlo y qué implicaciones tiene para la madre y el bebé son las dudas más comunes.
  • Conocer previamente cómo funciona los procedimientos pueden hacer que la decisión sea tomada en el momento oportuno.
  • La cita previa con el anestesiólogo semanas antes del parto es la herramienta más recomendada.
El parto es el cierre de la etapa de la maternidad y el inicio de la etapa de recién nacido. Muchas mujeres, durante su etapa de gestación, deben comprender las opciones de parto que tendrán. En gran medida, muchos de los cuestionamientos fueron resueltos en compañía de su ginecólogo, sin embargo el manejo del dolor en el parto es algo que solo puede experimentarse en el momento en el ocurre.


El dolor en el parto y la percepción del mismo varía según cada mujer. Esto puede acrecentarse por la duración del trabajo de parto, cansancio, miedo, ansiedad o condiciones previas de salud de la  madre.

Algunas mujeres pueden sobrellevar los dolores con el manejo de la respiración o con masajes que se enseñan en los cursos prenatales. Sin embargo, surge la pregunta ¿cómo manejarlo, sí ya se cumplieron estas etapas?. El uso de la analgesia o anestesia debe ser revisado con su obstetra y de ser posible, 6 semanas antes de la fecha de parto debería hacerse una consulta con el anestesiólogo.

“El manejo del dolor es muy importante y se puede utilizar técnicas que permiten que el nacimiento sea una etapa feliz para la madre y su hijo. Recibir a tiempo la analgesia en el parto es muy útil para ambos puesto que lo facilita y disminuye la ansiedad en la mujer” afirma el doctor Rómulo Rodado, anestesiólogo de Clínica La Colina.

Anestesia y analgesia    

La anestesia es el procedimiento mediante el cual se bloquea la sensibilidad y se logra la parálisis y la eliminación del dolor para un procedimiento, en todo el cuerpo o parte de el; mientras que en la analgesia, que es la intervención de la sensación del dolor de manera artificial, permite calmarlo o aliviarlo. En el trabajo de parto se usa la analgesia como técnica, ya que lo que se busca es convertir al parto en una etapa agradable, tolerable y no traumática; sólo en casos como la cesárea se usa la anestesia. 

Opciones de analgesia

  • Epidural: ofrece alivio constante en la parte inferior del cuerpo, a la vez que permite estar completamente consciente en el parto. Disminuye la incomodidad y molestia aliviando el dolor, pero no bloquea por completo la sensibilidad y el control. Se administra a través de un catéter muy delgado, flexible y hueco que se inserta en el espacio epidural, que está cerca de la membrana del fluido espinal. Es el más inocuo, común, seguro y más recomendado.
  • Espinal: similar en su efecto a la epidural pero con ligeros cambios en la técnica y el sitio donde se ubica el medicamento y por tanto efectos similares.
  • Vía endovenosa: en la institución médica, la madre siempre es manejada con líquidos endovenosos, por esta vía también pueden administrarse analgesia para el dolor; sin embargo esta técnica es secundaria, ya que en muchos casos puede afectar el parto por que no se tienen el control total de las reacciones del medicamento en el cuerpo de la madre y el bebé. 
  • Vía oral: mediante la toma de medicamentos en cápsula pueden ser manejado el dolor. Es la menos utilizada.

Ventajas de la epidural

  • Es una analgesia local que permite estar alerta y conciente durante todo el proceso del parto.
  • Es un calmante efectivo que puede usarse durante todo el parto.
  • Una vez que se coloca la epidural, se puede utilizar para dar anestesia en caso de que necesites una cesárea o ligamiento de las trompas.
  • El estar más descansada y calmada permite a la madre a tener más energía en el momento de pujar.

Riesgos de la epidural


  • El primer riesgo tiene que ver con la precisión que se requiere pues la paciente debe permanecer en una posición incómoda durante cerca de 10 minutos mientras realizan el procedimiento, y luego es necesario esperar de 5 a 20 minutos hasta que haga el efecto el medicamento. Sin embargo, esto es un inconveniente menor cuando el beneficio que se obtiene es horas sin dolor.
  • La epidural requiere de líquidos intravenosos, control frecuente de la tensión arterial y monitoreo fetal constante.
  • Según babycenter.com, una de cada 100 mujeres, este procedimiento causa intensos dolores de cabeza que pueden durar días. Eso es causado por una fuga del fluido espinal. Esto se reduce inicialmente manteniéndose lo más quieta posible cuando se te está colocando la aguja. Este riesgo existe pero su ocurrencia es muy baja, y el beneficio muy alto. Además es el procedimiento que menos afecta el bebé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario