APLICACIONES EDUCATIVAS PARA NIÑOS, UNA OPCIÓN DIVERTIDA
Y ENTRETENIDA PARA EL RECESO DE SEMANA SANTA
La época
de vacaciones es el momento ideal para desconectarse de la cotidianidad, de los
días de cargas laborales o de las jornadas escolares para dedicar el tiempo al
descanso y aprovechamiento del tiempo libre.
Es en
este punto donde la tecnología juega un papel muy importante, debido a que los
juegos y aplicaciones captan la atención de los niños y
jóvenes. Sin embargo, existe la preocupación de muchos padres al considerar que
puede ser nocivo este entretenimiento.
“En la actualidad hay aplicaciones especiales para aprender idiomas,
trabajar la atención y concentración, y reforzar los contenidos aprendidos en
el colegio para estimular la creatividad y el entretenimiento de los niños y
jóvenes. Estas aplicaciones –disponibles en Google Playstore - deben ser
escogidas según los gustos de los niños, pero también de los
valores y habilidades que los padres quieren promover”, asegura César Muñoz,
Gerente Senior de Ciudadanía Corporativa de Samsung Colombia.
El uso de la tecnología permite que los niños no se aburran y aprendan de
manera lúdica. Es una manera novedosa de motivarlos y potenciar sus
habilidades, dejarlos crear para lograr mejores resultados y jugar con su
curiosidad. El correcto aprovechamiento de estas herramientas crea mejores
escenarios de aprendizaje, diversión y entretenimiento. Es importante que el
uso de estas aplicaciones se haga bajo el acompañamiento de los padres,
balanceando también el tiempo para darles espacio a otro tipo de juegos al aire
libre.
“Los
padres pueden involucrarse en este tipo de actividades con los niños, jugar con
ellos en equipo o a manera de competencia, o inclusive generarle retos para que
complete ciertos niveles (y habilidades) y premiar sus logros. Puede ser una
buena alternativa para un acercamiento lúdico y educativo entre padres e hijos”,
resalta César Muñoz
Para que
no llegue Semana Santa y no sepa qué aplicaciones le pueden ser útiles, Samsung
Colombia le presenta unas opciones para cada edad, con base en la experiencia obtenida a través de su programa Smart School:
Para chicos de 0 a 3 años
ABC for Kids es una forma divertida para que
los niños en edad pre-escolar aprendan los nombres de las letras del alfabeto y
las reconozcan, por lo cual pueden practicar buscando las letras en un
contexto.
Learning Colors es un juego fácil y educativo que les ayuda a los pequeños a conocer de
forma divertida los colores. Con esta app los estudiantes de edad preescolar
aprenden jugando y sin esfuerzo el nombre de cada color asociándolo con
diversos objetos, frutas y animales.
Aprender a Leer reúne todos los ingredientes necesarios para hacerla
didáctica, a la vez que divertida. Facilita que el niño pueda jugar solo, sin
necesidad de un adulto a su lado para hacer el juego divertido o eficaz. Es,
sin duda, una de las apps más recomendables para aprender a leer.
Aprendizaje
de 3 a 6 años
Sílabas es el juego ideal para aprender
a leer y escribir de manera entretenida e interactiva. Los niños toman
conciencia de que las palabras están divididas en unidades pequeñas llamadas
sílabas y de esta manera adquieren la capacidad de separarlas. Así se estimula
y trabajao contenido previo a la lectoescritura.
10 Monkeys
Multiplicación es una manera divertida y atractiva de retar a los estudiantes a
aprender y a dominar sus tablas de multiplicar.
Duolingo Es la mejor forma más divertida para aprender inglés. Avanzas al completar
unidades, pierdes vidas por tus respuestas incorrectas, ganas puntos y subes de
nivel como en un juego.
Entretenimiento
de 6 a 10 años
Juegos mentales es la aplicación donde los estudiantes realizan ejercicios de
memoria, razonamiento, concentración, inteligencia espacial, velocidad y cálculo.
Math vs Zombies es una app donde el mundo está lleno de zombies y el
estudiante hace parte de un escuadrón de científicos altamente capacitados que
nos puede salvar, usando sus habilidades matemáticas y poderes especiales.
La palabra del medio es un juego de palabras
que suele ser rápido y fácil de resolver. Es una manera divertida para que los
participantes más jóvenes mejoren sus habilidades en ortografía.
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